En la soledad del campo miro fijamente el pasto. Mi casa, una linda mediagua blanca con ventanillas pequeñas; conformada por una cocinillas, un baño pequeño & mi habitación. Vivir sola es lo mejor, nadie te molesta. Cuando estoy pensativa toco mi guitarra & compongo canciones, tanto en inglés como en español.
Pero, pensando, ¿cómo apareció Nathan en el campo? Prácticamente, estoy sola. No hay casas ni nada. ¿De dónde viene él?
-De eso mismo te venía a hablar -dijo Nathan apareciendo de la nada.
-Pero... ¿Cómo sabes qué fue lo que pensé? -dijo perpleja.
-Es que... no sé cómo explicarte. Nicole, yo no existo aquí. Ni existo en el cielo.
-Pero... ¿Qué dices? -me salieron lágrimas.
-Soy el Demonio. Mi verdadero nombre es Marco Satán. Vine aquí para hacerte sufrir, para que sepas qué te espera para tu muerte.
-&... ¿Cuándo moriré?
-Ahora... -me hizo callar.
Se me acercó. Traté de huir, pero no pude; mis piernas no reaccionaban, es más, estaban atadas al suelo. Mis manos, amarradas también. Me quedé mirando a Marco Satán con cara de sufrimiento. Sentía que mi corazón se partía en dos, que me desgarraban los órganos. Mis extremidades repentinamente las ví en la laguna. Un ardor me recorría.
-¡Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhh! -fue lo último que sonó de mi garganta.
El suelo se partió en dos, Nathan me empujó al abismo. Era aquél abismo con el que soñé en estas dos semanas. Era aquél abismo sin fondo & sin luz donde uno cae & cae...
Continuará.
Por: Javithis.
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